El movimiento Sélvame del Tren confirmó el recorrido realizado por funcionarios de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT) y la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (CONANP) en el Tramo 5 Sur del Tren Maya (de Playa del Carmen a Tulum), así como el trabajo conjunto para decretar dos reservas naturales como medida para mitigar el impacto ambiental del megaproyecto.
Propuestas para compensar los daños ambientales
Guillermo D. Christy, miembro de la agrupación Cenotes Urbanos y de Sélvame del Tren, explicó para NewsDay Caribe que existen varias propuestas para compensar la destrucción causada por las obras. La principal es ampliar la Reserva de la Biósfera de Felipe Carrillo Puerto y decretar una zona protegida de cavernas y ríos subterráneos.
El activista destacó como un avance el acercamiento con la SEMARNAT, ya que ahora reconocen que el Tramo 5 es un patrimonio natural para Playa del Carmen. Sin embargo, señaló que el área —un corredor biológico muy importante— está afectada por más de 15,000 pilotes de concreto y acero que atraviesan cavernas y cenotes.
“Es importante que la SEMARNAT reconozca lo que les dijimos hace dos años. Pasamos de ser llamados ‘seudoambientalistas’ a tener un diálogo. Hay que buscar un equilibrio para lo que le queda a Playa del Carmen”, afirmó Christy.
🔴 COMUNICADO 🔴
— SELVAME (@SelvameMX) April 2, 2025
Con relación a las declaraciones de @SEMARNAT_mx sobre el daño del Tren Maya al Medio Ambiente y sobre su propuesta de resarcir y hacer una Reserva de la Biosfera para proteger los Ríos Subterráneos y Cenotes. pic.twitter.com/aN4HX9cyC0
Regeneración natural y turismo comunitario
Pedro Álvarez Icaza, comisionado nacional de Áreas Naturales Protegidas (CONANP), señaló que, con el tiempo, la vegetación crecerá junto a las vías del tren, ya que la ausencia de ganado facilitará la recuperación de la selva.
Explicó que el proceso de regeneración pasará por etapas:
- Acahual (hierbas) en 6-8 años.
- Selva baja y mediana en décadas posteriores.
Además, mencionó que faltan pasos de fauna (incluyendo subterráneos para primates y felinos) y que el impacto ambiental del Tren Maya afecta solo el 5% de la selva.
“Creo que hay una gran oportunidad para restaurar y proteger el área, instalar pasos de fauna, retirar el mallado inadecuado, crear una nueva reserva de conservación para cenotes y fomentar apoyos para el turismo comunitario”, informó.
Álvarez Icaza destacó que se impulsará el turismo comunitario en la región maya, con estaciones para la venta de artesanías apoyadas por la CONANP.
¿Es suficiente?
Christy aclaró que, aunque existe la intención de que sea ampliada una reserva natural en el Tramo 5 todavía es algo que están preparando, no basta para resarcir los daños. También mencionó que se busca involucrar a las familias de las comunidades locales en la siembra de árboles de chicle, una propuesta de la misma SEMANART.
Mientras las autoridades confían en la regeneración natural, los activistas insisten en que se necesita más acción para proteger el frágil ecosistema de Quintana Roo.