A partir de este verano comenzará a cobrarse el DNR, o Derecho de No Residente a cruceristas en Quintana Roo, esto, tras un proceso de diálogo en el cual los tres órdenes de gobierno acordaron aplicarlo de forma gradual.
Así lo informó este miércoles la gobernadora del estado, María Elena Lezama, quien explicó que la justificación del cobro radica en que este segmento turístico no genera una derrama económica significativa, al tratarse de visitantes que solo permanecen algunas horas en los destinos de la entidad.
Señaló que la negociación con los dueños de las navieras no fue sencilla, debido al rechazo inicial por parte de las y los cruceristas, pero finalmente se consiguió un acuerdo.
El cobro iniciará en la temporada de verano de 2025 con cinco dólares y será hasta el verano de 2028 cuando el monto alcanzará los 21 dólares por crucerista en tránsito en Quintana Roo.
Sobre el proceso de negociación para lograr este acuerdo con las navieras, explicó que se logró con apoyo de la presidenta de la República, Claudia Sheinbaum; la secretaria de Turismo federal, Josefina Rodríguez Zamora; y funcionarios de la Secretaría de Hacienda de México.
La gobernadora dijo que aún se están afinando los detalles sobre el mecanismo de cobro, pero el avance es considerable.
Al ser cuestionada sobre si habrá una modificación a la Ley Federal de Derechos para establecer el cobro del Derecho de No Residente a cruceristas en Quintana Roo, respondió:
“En eso están trabajando, no sé si será un subsidio en los primeros meses de este año, en eso está trabajando Hacienda”.
El antecedente del impuesto a turistas de crucero en Quintana Roo
Quintana Roo es el estado con mayor número de arribos de cruceros en el país, destacando los embarcaderos de Cozumel y Mahahual como los más importantes.
“Hace un año tenemos un acuerdo con los ejecutivos de las líneas de cruceros para que pagaran un derecho cada vez que llegan a los puertos de Quintana Roo”, recordó Lezama.
Agregó que los recursos obtenidos se canalizan mediante el Fideicomiso para el Bienestar del Turismo Crucerista, con el cual se hace una inversión histórica tanto en Cozumel como en Mahahual. Parte de los recursos recaudados también se destinan al Fondo de Desastres Naturales.
Lezama remarcó que años atrás la asociación de líneas navieras se había negado a pagar un derecho por atracar en puertos de Quintana Roo, pero al transparentarse el destino de los recursos y al saber que serían dirigidos a la ciudadanía que atiende a las y los cruceristas, “cambiaron de parecer”.
Estas son las condiciones del acuerdo
La condición para aplicar el Derecho de No Residente a cruceristas en Quintana Roo de forma escalonada es que las navieras promocionen el destino y que motiven a sus turistas a adquirir productos locales, como las artesanías.
Así lo explica la Secretaría de Turismo federal a las navieras en los documentos informativos que les ha hecho llegar, además, especifica de la siguiente manera el cobro escalonado del Derecho de No Residente a cruceristas en Quintana Roo:
- $5 dólares por pasajero, del 1 de julio de 2025 al 31 de julio de 2026.
- $10 dólares por pasajero, del 1 de agosto de 2026 al 30 de junio de 2027.
- $15 dólares por pasajero, del 1 de julio de 2027 al 31 de julio de 2028.
- $21 dólares por pasajero, a partir del 1 de agosto de 2028, en adelante.
Otros compromisos pactados incluyen que los cruceristas adquieran un porcentaje mínimo de productos bajo el programa Hecho en México, a partir de 2025.
Además, se estableció que la asociación de cruceristas deberá aumentar la generación de empleos, incluir métricas sobre la participación de empresas mexicanas en la cadena de suministro de la industria, y sostener mesas de trabajo con representantes del Gobierno de México y principales líneas de cruceros, con el objetivo de fortalecer la relación comercial entre el Estado y la iniciativa privada.