La Riviera Maya se mantiene como un destino obligado para diversas familias migrantes, que incluyen infancias, que buscan mejores oportunidades de vida, afirmó Armando García, oficial de Protección en Infancia y enlace de la oficina administrativa de Niñas, Niños y Adolescentes del Instituto Nacional de Migración (INM).
El funcionario expuso que estas personas provienen principalmente de países como Honduras, Guatemala, El Salvador, Venezuela y Colombia, y se ven forzadas a dejar sus lugares de origen, y encuentran en Quintana Roo mejores fuentes de empleo y calidad de vida.
En lo que va de 2025, el INM ha atendido aproximadamente seis casos de niñas y niños en situación de movilidad.
Sin embargo, indicó que la estadística del año pasado fue más alta, aunque actualmente el flujo migratorio ha disminuido, en gran parte por la situación que se vive en los Estados Unidos.
El funcionario mencionó que la atención a estos menores es particularmente delicada en el ámbito educativo, por lo cual se están estableciendo acuerdos con instancias de gobierno municipal, como la Procuraduría de Protección, así como con el DIF estatal y municipal, para atender integralmente las necesidades de niños, niñas y adolescentes.
Hasta el momento –dijo– no se ha detectado ningún caso de menores víctimas de trata de personas, señaló.
Añadió que las políticas migratorias aplicadas durante el gobierno del expresidente Donald Trump aún no han impactado directamente al estado, pues no se ha registrado el arribo de personas deportadas.
“Lo que hacemos es establecer los procedimientos administrativos migratorios para trabajar con ellos, iniciar los trámites necesarios y determinar si se trata de casos de trata de personas o simplemente de menores no acompañados en búsqueda de una mejor condición económica, con la intención de establecerse en los Estados Unidos”, explicó.
El oficial de Protección en Infancia del INM indicó que en Playa del Carmen no se presenta una situación especialmente alarmante.
La mayoría de las y los menores de edad que migran a Quintana Roo, ingresan por de Chiapas y desde ahí se desplazan por el sureste hasta llegar a Campeche; en otros casos, emprenden el camino de regreso a sus países de origen.
Armando García comentó que han atendido a personas en situación de movilidad que han decidido no continuar su trayecto hacia Estados Unidos. En esos casos el INM se coordina con las Procuradurías para brindarles el apoyo necesario.
Finalmente, señaló que se han redoblado los esfuerzos en los recorridos de supervisión en todo el país para brindar atención oportuna a los grupos migrantes.
También recordó que los padres y madres que viajan con sus hijos e hijas, y que desean que estos estudien en México, primero deben regularizar su situación migratoria y obtener su Clave Única de Registro de Población (CURP).
