La asociación civil “Dog Beach” solicitó a autoridades de Solidaridad que sea visible el reglamento de uso de la Playa 72 a través de un cartel, instalado al ingreso del sitio, para garantizar una mejor convivencia entre los vecinos, turistas y sus perros. También acordaron crear un nuevo reglamento y permitir un acceso con perros a dicho arenal.
“Hay un reglamento que se aprobó en Cabildo en el mes de julio y que tiene que ponerse en la playa mascotas”, dijo Sergio Beristain, dirigente de la agrupación.
Junto con otros miembros del grupo, se reunieron por primera vez con Orlando García, director de Normatividad y Evaluación de Impacto Ambiental, con Irving Rafael Lili Madrigal, director de Zona Federal Marítimo Terrestre (Zofemat) y con Mariana Rubio, coordinadora del Centro de Control Animal, Asistencia y Zoonosis (Cencaaz) del ayuntamiento, para hacer la solicitud.
El activista dijo que ha sido difícil la convivencia en la playa, en que se permite el acceso para perros, porque cuenta con una certificación de Blue Flag.
La certificación no permite recibir mascotas y la criticó por tratarse de un distintivo de una empresa internacional, cuyo costo es tres veces mayor a la certificación mexicana “Platino”, que es amigable con las mascotas.
Beristain explicó que el cartel de la Blue Flag que prohíbe el ingreso de perros fue vandalizado hace un mes, pero ya fue reparado.
En contraste, el otro letrero que permite el acceso a las mascotas, también grafiteado, sigue sin repararse.
“La gente no lo quiere”
En su opinión, la certificación Blue Flag se dio “por debajo del agua”, aunque es público que se recibió y consideró que “la gente no lo quiere”, sin exhibir pruebas que comprobaran ambas aseveraciones.
Hoy mismo se llevó a cabo la primera mesa de trabajo entre personal de la asociación civil y las autoridades municipales.
Beristain remarcó ahí que el turismo en Playa del Carmen se vende solo cuando hay calles limpias, “sin heces fecales y perros callejeros”.
Reiteró que para la mejor convivencia entre las y los dueños y sus mascotas debe de ser instalado el cartel, porque ya tienen problemas al intentar ingresar a la Playa 72 los fines de semana.
Expuso que la playa para perros es especial porque el espacio fue gestionado por habitantes de la zona, porque no es una playa turística como las del centro que son arenales concesionarios.
Playa 72 —subrayó— está ubicada en el último pulmón verde, Chen Zubul.
También solicitó que se instruya al personal para saber cómo actuar en caso de algún ataque de perros, para mantener la seguridad de la playa.
Dijo que así como el Ayuntamiento invierte en traer artistas famosos a eventos de esparcimiento, de la misma forma tendría que destinar recursos a la educación cívica.
Acuerdan cambiar el reglamento
Después de la reunión, Sergio Beristain informó a News Day Caribe que llegaron a un punto medio de la discusión para el cambio del reglamento que servirá en la playa para perros, pero no se estableció cuándo se va a presentar.
Dijo que acordaron que establecerán horarios para el ingreso de perros sin correa, preferencialmente durante la mañana.
Sergio Beristain mencionó que acordaron que la parte Norte de la 72 a la calle 88 no va haber perros.
Entre los temas que hubo discrepancias, está que las autoridades señalaron que no permitirían la entrada a dueños de mascotas que no llevaran la cartilla de vacunación de sus perros.
El activista lo consideró irreal porque las cartillas de vacunación pueden ser falsificadas fácilmente y además nadie sale de su casa con la cartilla de vacunación de su mascota para ir a la playa, dijo.
Señaló que los dueños de las mascotas deben ser responsables de vacunar a sus mascotas, para que ante alguna mordedura de su perro a una persona u otro can, deban mostrar la cartilla para que no tenga consecuencias como sanciones, pero promueven la educación.
Por su parte, Mariana Rubio, señaló que el reglamento de uso de playa es una combinación del Reglamento de Bienestar Animal y reglas hipotéticas de convivencia, es decir, porque la ley no marca que un perro no puede estar en la playa, sin embargo, se está designando un espacio para que la gente tenga a su perro en el arenal.
Pero el reglamento de Bienestar Animal sí regula otras cosas, como que los dueños tengan a sus perros con correa.
Los miembros de Dog Beach buscan que el reglamento del uso específico de la playa a donde van los perros sea una creación en conjunto con el reglamento de Bienestar Animal.