Trabajadores de hoteles en la Riviera Maya han recolectado 12 toneladas de residuos plásticos y latas de aluminio, así como 900 kilos de residuos peligrosos, gracias a los programas de reciclaje comunitarios implementados en los centros de hospedaje.
Estos residuos son entregados limpios a proveedores que los reutilizan, y la recolección se realiza dos veces al mes. El compromiso del personal hotelero con el medio ambiente ha sido clave para mantener la operación de estas iniciativas.
Turismo consciente: los visitantes también participan
David Ortegón, director de Sostenibilidad de Playa Hotels and Resorts, que representa diversas marcas hoteleras en la región, señaló que cada vez hay más turistas interesados en alojarse en hoteles ecológicos.
Afirmó que, aunque los visitantes vienen a vacacionar, suelen sumarse a causas sociales y ambientales cuando el personal los invita a participar, ya sea comprando productos artesanales o apoyando a comunidades indígenas locales.
“Si se les muestra que un tema social es importante, los turistas se suman”, expresó Ortegón.
Reciclaje con impacto social
Ortegón también destacó que el dinero recaudado por el reciclaje llevado a cabo por empleados es destinado a proyectos que impulsan la actividad económica y social de las poblaciones indígenas.
Añadió que cada empresa desarrolla su propio programa de sostenibilidad, ajustado a su estrategia de operación. Aunque existen criterios comunes, los proyectos suelen estar adaptados a las características particulares de cada cadena hotelera.
Playa Cares: el modelo de sostenibilidad hotelera
El sistema “Playa Cares” integra todas las acciones de sostenibilidad de estos destinos, abarcando áreas ambientales, sociales y operativas. A partir de este esquema, cada empresa elige con qué certificación alinearse, dependiendo de lo que quiera comunicar a sus huéspedes.
Entre los sellos de sostenibilidad que buscan algunos hoteles destacan Playa Platinum y Green Destination, aunque, según Ortegón, los turistas no buscan necesariamente un certificado, sino prácticas responsables.
“Lo que quieren es una operación limpia, respetuosa con el destino, y una representación auténtica de la cultura y la gastronomía local”, subrayó.
Más allá de los certificados: aplicar la sostenibilidad
Ortegón recordó que los viajeros actuales valoran el respeto por la fauna y evitan consumir servicios que no cumplan con normas de protección animal. Subrayó que no es obligatorio tener un sello, sino aplicar verdaderamente los principios de sostenibilidad.
“La idea es que el destino esté tan bien cuidado que todos quieran vivir aquí”, agregó.
David Ortegón señaló que, en el tema del reciclaje de basura, llegará un momento en que los hoteles cumplirán con toda la normativa; sin embargo, no suele ocurrir lo mismo en las colonias de la ciudad, donde vive la mayoría de los empleados.
Finalmente, destacó que los temas más innovadores en sostenibilidad dentro del sector hotelero actualmente son la eficiencia energética, la reducción del consumo de agua potable y el manejo adecuado de residuos sólidos.