Ante las protestas provocadas por la detención de Francisco Clemente “N”, identificado como probable responsable del homicidio de Ramiro, quien se desempeñaba como enfermero en una clínica del ISSSTE en Chetumal, la Fiscalía General de Quintana Roo (FGE), aseguró que se encuentra con evidencia sólida que acredita su presunta participación en el crimen.
“Tenemos evidencias sólidas, donde se acredita la presunta participación de esta persona”, dijo el titular de la FGE, Raciel López, quien se quejó del bloqueo de la carretera federal a la altura de Nicolás Bravo, ayer, por parte de personas que protestaron contra la detención de Clemente.
Las y los manifestantes consideran que el investigado es un “chivo expiatorio”, aprehendido por las autoridades solo para simular que se brindan resultados; sin embargo, el funcionario dio el parte oficial, con las pruebas que dieron pie a la detención de Clemente.
Esta mañana, durante la conferencia que realizan las autoridades estatales, López Salazar indicó que Ramiro, enfermero de profesión, fue reportado como desaparecido desde el pasado 13 de abril.
Su cuerpo fue localizado en un camino de terracería en las inmediaciones de la localidad de Nicolás Bravo, en el municipio de Othón P. Blanco.
Esto hizo Ramiro antes de desaparecer
Conforme a las investigaciones, Ramiro fue visto por última vez cuando se dirigía a la localidad Felipe Ángeles, donde reside su padre. Salió a bordo de su vehículo particular, un Chevrolet Tracker color gris y la última comunicación que sostuvo fue con su madre, residente en Estados Unidos.
A ella le informó vía telefónica que se encontraba en Nicolás Bravo, pues había pasado a comprar una llanta de refacción, ya que en la localidad Francisco Villa se le ponchó una llanta trasera. Después de eso no volvieron a tener comunicación con él.
Ante la falta de noticias, los familiares iniciaron la búsqueda del enfermero en Nicolás Bravo. No lograron localizarlo ni encontraron su vehículo.
Ese mismo día se reportó el incendio de un automóvil con las características del Tracker, ubicado en un tramo carretero del poblado de Nicolás Bravo.
El fiscal detalló que el 14 de abril, los familiares presentaron la denuncia formal por el delito de desaparición cometida por particulares en agravio de Ramiro.
La Fiscalía emitió una ficha de búsqueda y, del 15 al 17 de abril, se implementaron operativos de búsqueda en Nicolás Bravo y otras comunidades como Tres Garantías, Subteniente López y Francisco Villa.
Las acciones fueron realizadas por un grupo interinstitucional conformado por la Fiscalía del Estado, el Ejército Mexicano, la Secretaría de Marina, la Guardia Nacional, las policías Estatal y Municipal, la Comisión Estatal de Búsqueda y Protección Civil.
Localiza #FGEQuintanaRoocuerpo de persona desaparecida en OPB y detiene a presunto responsable de homicidio. (1/2)#CeroImpunidad#JusticiaParaTodos
— Fiscalía General del Estado de Quintana Roo (@FGEQuintanaRoo) April 18, 2025
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Clemente fue la última persona que vio a Ramiro con vida
Durante la investigación, se identificó a Francisco Clemente como la última persona que vio a Ramiro con vida.
Según la indagatoria, Ramiro lo contactó el 13 de abril para solicitarle su apoyo con la finalidad de buscar una vulcanizadora debido a la ponchadura de la llanta. Clemente lo llevó con un mecánico en Nicolás Bravo.
El 17 de abril, en un camino de terracería en los alrededores de esa localidad, se localizó el cuerpo de una persona, con un impacto de arma de fuego en la cabeza.
En el lugar se halló un casquillo calibre 9 milímetros, de uso exclusivo del Ejército, Armada y Fuerza Aérea. Las autoridades confirmaron que el cuerpo correspondía a Ramiro.
Rescatan #FGEQuintanaRoo y Grupo Centurión a dos jóvenes víctimas de secuestro virtual en Othón P. Blanco.#CeroImpunidad#JusticiaParaTodos
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Las pruebas que involucran a Francisco Clemente
Como parte de las diligencias, el 18 de abril se realizó un cateo en el domicilio de Francisco Clemente.
En el lugar se aseguró un arma de fuego calibre 9 milímetros abastecida con nueve cartuchos útiles, una motocicleta marca Bento, un teléfono celular y dos placas metálicas con daño por quemadura que corresponden al vehículo del enfermero.
De acuerdo con la necropsia de ley, la causa de muerte de Ramiro fue “traumatismo torácico cerrado contuso”, es decir, la víctima recibió varios golpes en el pecho, previo al disparo.
Además, se identificó una herida por proyectil de arma de fuego en la región frontal derecha del cráneo, la cual fue considerada “post-mortem”, lo que indica que el disparo fue realizado después del fallecimiento.
El dictamen de balística comparativa del sistema IBIS determinó que el casquillo hallado en la escena fue disparado con la misma pistola asegurada en el domicilio de Clemente.
Francisco Clemente fue puesto a disposición del juez de control, quien le impuso la medida cautelar de prisión preventiva, en tanto se determina su situación jurídica conforme a derecho.
“Ahorita este está en manos del juez de control. Ahí es donde deben de acreditar la supuesta inocencia de este señor (Clemente). No se deben litigar estos casos en los medios de comunicación ni mediante bloqueos a las vías de comunicación”, indicó el fiscal.
